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¿El vino provoca migraña?

24/02/2025
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¿El vino provoca migraña?

24/02/2025

Maribel Lucerón-Lucas-Torres, Marta C. Ruiz-Grao, Carlos Pascual-Morena, Susana Priego-Jiménez, María López-González, Celia Álvarez-Bueno

Artículo publicado el 21 de febrero de 2025 en  Enlace 🔗

 

Contesta un equipo de la UCLM que ha revisado más de 1.250 publicaciones científicas

¿Es el vino un desencadenante de la temida migraña? Pues ni sí ni no ni todo lo contrario. Enfermeras y fisioterapeutas de cinco facultades de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), después de revisar más de 1.250 publicaciones científicas, han llegado a la conclusión de que no hay evidencia suficiente para una respuesta tajante a la pregunta.

 

·         Autores del estudio: Maribel Lucerón-Lucas-Torres, Facultad de Enfermería de Albacete, Marta C. Ruiz-Grao, Facultad de Enfermería de Albacete, Carlos Pascual-Morena, Facultad de Enfermería de Albacete, Susana Priego-Jiménez, María López-González, Celia Álvarez-Bueno

·         Grupo de Investigación Age-ABC del Centro de Estudios Socio-Sanitarios de la Universidad de Castilla-La Mancha.

·         El estudio lo ha publicado ‘Oxford Academic’.

El metaanálisis, de enfermeras y fisioterapeutas de cinco facultades de la UCLM, resulta esclarecedor

Así, el artículo ‘¿Existe relación entre el consumo de vino y padecer migrañas en los adultos?’ es una revisión sistemática y meta-análisis para sintetizar la evidencia existente sobre la asociación entre el consumo de vino y la migraña en la población general.

Y es que la migraña, que afecta a dos de cada cien personas, es un trastorno neurológico que se caracteriza por episodios recurrentes de dolor de cabeza, acompañados de alteraciones en el sistema nervioso, el tracto gastrointestinal y las funciones sensoriales.

Además del dolor, los síntomas incluyen náuseas, vómitos, fonofobia y fotofobia. Como recuerda Maribel Lucerón Lucas-Torres, profesora en la Facultad de enfermería de Albacete, «la migraña es una de las enfermedades más incapacitantes a nivel mundial».

En la búsqueda de las cusas y soluciones, a lo largo de los años se han identificado varios factores que pueden contribuir a la migraña. De hecho, la genética juega un papel fundamental, al igual que factores endógenos como la menstruación.

Factores exógenos

Sin embargo, los factores ambientales o exógenos, como la dieta, también son clave y pueden modificarse. Entre los alimentos comúnmente asociados con las migrañas se encuentran el chocolate, la cafeína, la leche, el queso, los alimentos grasos, los cítricos y el alcohol.

En particular, el impacto del alcohol sigue siendo un tema de debate, y aunque se ha observado que el vino tinto puede causar dolores de cabeza incluso en personas sin migraña, la evidencia es controvertida. Dado que la relación entre el consumo de vino y las migrañas aún no está clara, investigadores de la facultades de Enfermería de Albacete, Cuenca, Talavera de la Reina, Toledo y Ciudad Real optaron por una revisión sistemática y metaanálisis para investigar la posible asociación entre ambos.

Sulfitos

De hecho, existen diversos componentes en el vino que podrían estar relacionados con la aparición de migrañas. Uno de ellos son los sulfitos, cuya relación con las migrañas es controvertida, ya que aunque se encuentran en muchos alimentos, no siempre provocan este efecto. Se cree que podrían afectar a personas sensibles al liberar histaminas, pero no se consideran la causa principal.

«Otros componentes como los fenoles y la tiramina también se han vinculado a las migrañas, aunque la evidencia sugiere que su bajo contenido en el vino hace improbable que sean desencadenantes significativos», apunta Lucerón Lucas-Torres. Además, el vino tinto podría inducir migrañas alterando los niveles de serotonina y dopamina, aunque aún se desconoce la sustancia exacta responsable de este efecto.

En definitiva, la relación entre el etanol y las migrañas es compleja, ya que depende de factores genéticos, sensibilidad individual y mecanismos neurovasculares, y aún no está completamente comprendida.

¿Cuestión de cantidad?

«Nuestro meta-análisis no encontró una asociación clara entre el consumo de vino y la migraña, aunque estudios previos sugieren que cantidades moderadas de alcohol no desencadenan migrañas, mientras que un consumo excesivo aumenta el riesgo», subraya la profesora de Enfermería.

Sin embargo, el trabajo, como reconocen sus autores, presenta limitaciones, como el bajo número de estudios incluidos, la falta de un cuestionario estandarizado y la imposibilidad de analizar los efectos de diferentes tipos y cantidades de vino en la migraña.

En resumen, no hay evidencia concluyente que vincule el consumo de vino con un mayor riesgo de migraña, «pero es necesario continuar investigando, diferenciando por tipo de vino, dosis y otros factores, y mejorar el diseño de los estudios para obtener evidencia más sólida», como apuntan los investigadores.

 

 

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